sábado, 4 de abril de 2020

LA SANGRE DE JESÚS



LA SANGRE DE JESÚS

INTRODUCCIÓN

                         
¿QUÉ HACE LA SANGRE DE JESÚS POR NOSOTROS?

Por la sangre de Jesús tenemos redención que significa: Rescatar, recobrar una cosa perdida. Liberación de la esclavitud del pecado y goce de una nueva libertad por el sacrificio redentor de Cristo. La muerte de Cristo y su sangre derramada es el precio del rescate. Nos hizo aceptos ante Dios. Somos redimidos de la mano y poder del diablo, nos reconcilió con Dios y nos trasladó a su Reino. Efesios 1:7.
En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia. Colosense.1:13. El cual nos ha librado de la potestad de las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo. Colosenses. 1:14. En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados.
SI NO COMEN LA CARNE DEL HIJO DEL HOMBRE, Y BEBEN SU SANGRE, NO TIENEN VIDA EN USTEDES
Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: Si no coméis la carne del Hijo del Hombre, y bebéis su sangre, no tenéis vida en vosotros. Juan. 6:53. El que come mi carne y bebe mi sangre, tiene vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero. Juan. 6:54. 
En levítico dice: Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona. Levítico. 17:11.
Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su Hijo nos limpia de todo pecado. 1 Juan 1:7. 1:7.
                              

LO CUAL ES SÍMBOLO PARA EL TIEMPO PRESENTE

Lo cual es símbolo para el tiempo presente, según el cual se presentan ofrendas y sacrificios que no pueden hacer perfecto, en cuanto a la conciencia, al que practica ese culto. Hebreos. 9:11. 9:9.
Ya que consiste sólo de comidas y bebidas, de diversas abluciones, y ordenanzas acerca de la carne, impuestas hasta el tiempo de reformar las cosas. Hebreos. 9:10.                                        
PERO ESTANDO YA PRESENTE CRISTO   
Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación. Hebreos. 9:11. 
Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención. Hebreos. 9:12.                   
PORQUE SI LA SANGRE DE LOS TOROS Y DE LOS MACHOS CABRÍOS
Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne. Hebreos. 9:13.
¿Cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo? Hebreos. 9:14.
ACERQUÉMONOS CON CORAZÓN SINCERO
Acerquémonos con corazón sincero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua pura. Hebreos. 10:22.Más éste, por cuanto permanece para siempre, tiene un sacerdocio inmutable. Hebreos 7:24.
Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acerca a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos. Hebreos 7:25.                                          
QUE NO TIENE NECESIDAD CADA DÍA
Que no tiene necesidad cada día, como aquellos sumos sacerdotes, de ofrecer primero sacrificios por sus propios pecados, y luego por los del pueblo; porque esto lo hizo una vez para siempre, ofreciéndose a sí mismo. Hebreos 7:27. 
Y diciendo luego: He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero, para establecer esto último. Hebreos 10:9.                                   
EN ESA VOLUNTAD SOMOS SANTIFICADOS
En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre. Hebreos 10:10.
Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados. Hebreos 10:11.     
CRISTO, HABIENDO OFRECIDO UNA VEZ PARA SIEMPRE UN SOLO SACRIFICIO
Pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios. Hebreos 10:12. Porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados. Hebreos 10:14.                                              
POR CUANTO TODOS PECARON       
Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios. Romanos. 3:23.                  
SIENDO JUSTIFICADOS GRATUITAMENTE POR SU GRACIA
Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús. Romanos.3:24. 
A quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados. Romanos.3:2.                                     
PERO ESTANDO YA PRESENTE CRISTO
Pero estando ya presente Cristo, sumo sacerdote de los bienes venideros, por el más amplio y más perfecto tabernáculo, no hecho de manos, es decir, no de esta creación. Hebreos.9:11. 
Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención. Hebreos.9:12.                   
PORQUE SI LA SANGRE DE LOS TOROS Y DE LOS MACHOS CABRÍOS
Porque si la sangre de los toros y de los machos cabríos, y las cenizas de la becerra rociadas a los inmundos, santifican para la purificación de la carne. Hebreos. 9:13.
¿Cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras muertas para que sirváis al Dios vivo?  Hebreos. 9:14.                            
SIN DERRAMAMIENTO DE SANGRE NO SE HACE PERDÓN
Y casi todo es purificado, según la ley, con sangre; y sin derramamiento de sangre no se hace remisión (perdón). Hebreos 9:22.
Fue, pues, necesario que las figuras de las cosas celestiales fuesen purificadas así; pero las cosas celestiales mismas, con mejores sacrificios que estos. Hebreos 9:23.
Porque no entró Cristo en el santuario hecho de mano, figura del verdadero, sino en el cielo mismo para presentarse ahora por nosotros ante Dios. Hebreos 9:24.                                    
NO PARA OFRECERSE MUCHAS VECES
Y no para ofrecerse muchas veces, como entra el sumo sacerdote en el Lugar Santísimo cada año con sangre ajena. Hebreos 9:25.
De otra manera le hubiera sido necesario padecer muchas veces desde el principio del mundo; pero ahora, en la consumación de los siglos, se presentó una vez para siempre por el sacrificio de sí mismo. Hebreos 9:26.
                                                           
CONCLUSIÓN

La sangre de Jesús es suficiente para pagar el precio para rescatamos de las consecuencias del pecado y ha preparado el camino para que nosotros volvamos a tener relación con Dios. La sangre de Jesús nos purifica de todo pecado si caminamos en la luz con Dios y confesamos nuestro pecado a Dios. La sangre de Jesús sólo necesitó ser derramada una vez porque. Él era el sacrificio perfecto y por tanto aceptable a Dios una vez y para siempre.
Escrito por: DONALDO E. VILLAZON A, Doctor en Filosofía de La Religión, licenciado en Teología, Diploma en Teología y Ciencias Religiosa, Técnico en Teología Ciencias Religiosa y Administración Eclesial.

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